Mi hermano, mi amigo...
Como me gustaba jugar con vos en el jardín,
aunque a veces te enojabas conmigo,
el amor que nos tenemos nunca tendrá fin.
Mi amigo, mi fiel compañero...
de mil travesuras juntos,
se que me he enojado contigo,
y que ser amado siempre fue algo tan tuyo.
Mi fiel compañero, un pedazo de mi alma...
me despedí antes de que te vayas,
pero no pensé que pasaría de la noche a la mañana,
te vi sufrir, estar agotado, dar tu ultimo suspiro,
la peleaste como un campeón, nunca te diste por vencido.
Hermano de mi vida,
yo vi apagarse tus ojos y encenderse tu alma,
gracias por esperarme, por dejarme despedirte.
Me tranquiliza saber que te fuiste en calma.
"Habla conmigo viejo perro blanco"
te cante esa canción todo el día,
"ladra tu quebranto" lo hiciste toda la vida.
"perdonado" es el grito final,
aunque en desde un principio te ganaste las alas
característica tuya, la pureza de tu alma.
Estuve el día en que se apagaron tu ojos,
con un ultimo respiro de alivio,
encendiste tu alma, y dejaste en mi un vació
que llene de amor y nostalgia.
Era tu hora, lo sé,
Por eso te dejé ir,
y llorando a tu lado
te abracé...
Ese abrazo dura hasta hoy,
siempre estarás conmigo,
aunque tus travesuras no pueda ver
se que duermes al lado mio.
Tus ojos siguen brillando,
los veo en las estrellas.
Que estarás haciendo en la luna?
veo mucho movimiento en ella.
Vi como tus ojos se apagaron,
Vi como se encendió tu alma.
Sabes que te voy a amar siempre,
y que puedo sentirte en los pies de mi cama.
